Nada personal


  
¿Cómo así que me lo dicen a mi, pero no es conmigo?  Esa fue mi pregunta por mucho tiempo. 

Agradar a los demás y caer bien a todo el mundo parecía ser mi mayor reto. Aunque solía escuchar la frase «no se puede ser monedita de oro para caerle bien a todo el mundo», yo parecía creer tener el encanto suficiente para lograrlo. Cuán engañado y cargado innecesariamente viví!

Por fortuna, y en el tiempo necesario, logré superar esa locura. Y no estaba solo. Para muchas personas lo que los demás hagan o digan cuenta e influye en sus vidas de una manera directa y en algunos casos trascendentalmente. Todo depende de las palabras que recibimos de quienes nos rodean y de las situaciones que se nos presentan diariamente. Incluso, de la importancia que le damos a nuestros propios pensamientos. Nos ofende lo que nos dicen, nos hacen o piensan de nosotros y todo porque elegimos darle poder a los demás. Así de simple.

Si eliges tomarte las cosas personalmente, estarás de acuerdo con todo lo que te digan y será importante para ti. Reaccionaras, posiblemente sin pensar, solo trayendo conflictos. Defenderás y justificaras tus acciones con la necesidad de demostrarles que tienes la razón y ellos están equivocados. Y todo esto es porque nos hemos acostumbrado a que necesitamos tener la aprobación de los otros, cuando en realidad la única aprobación que necesitas es la tuya propia.

Ahora entiendo que suceda lo que suceda alrededor, para vivir felizmente, no hay que tomarse nada personal. Las palabras de los demás son reflejo de su experiencia de vida y aprendizaje. Pueden opinar, pero siempre será desde su óptica y lo que funciona para unos no funciona quizás para ti. Que quede claro que digan lo que digan, no se trata de lo que tú eres, sino de lo que ellos son. Considera siempre, antes de reaccionar, que las personas están llenas de prejuicios y nadie ve la vida con tu misma óptica, toma lo bueno de quienes te aportan y lo demás tíralo a la basura, no lo cargues, no lo asumas.

De hecho, las palabras ofensivas, los malos modales, conductas agresivas, personas mal humoradas, amargadas o los golpes hablan más de quienes los emplean que de aquellos que los reciben.
Cuando te tomas todo personal vives resentido con el mundo, con todos los demás. Es la típica sensación de todos están en mi contra, no me entienden, no me comprenden, nadie me quiere. 

Cuando tomamos todo lo que dicen los demás o lo que sucede de una manera tan personal, perdemos la perspectiva de analizar, escuchar, interpretar la intensión de los demás y tomar decisiones en calma basadas en un análisis de qué es lo mejor. Le damos a los demás la capacidad de manejarnos emocionalmente, pero esto porque nosotros mismos lo permitimos, no porque ellos sean capaces.

Por eso, cuando alguien te diga algo, analiza qué tanto de cierto tiene y sobre todo si esa persona está enojada más que contigo, consigo misma. Antes de reaccionar, de actuar, analiza, respira, aprender a luchar las batallas que debes y que sean necesarias, porque si peleas todas podrías terminar cansado para ganar las verdaderamente importantes.

Si alguien te critica, posiblemente está viendo en ti algo que desearía ser o tener y entonces por eso su actitud negativa. Incluso si recibes elogios, no te los tomes personalmente. Como bien dice Miguel Ruíz, «Si alguien te dice que eres maravilloso, no lo dice por ti. Tú sabes que eres maravilloso. No necesitas que otras personas te lo digan para creerlo».

Antes de tomarte algo a pecho o personal, piensa qué tipo de vida, situaciones, día está teniendo esa persona, porqué se comporta de la manera que está actuando contigo y con los demás, entiende que esa persona puede arrastrar y cargar muchas cosas que no tienen por qué afectarte a ti, aunque se desahogue contigo. Aun los elogios que te da pueden hablar mas de esa persona que de ti, asi que tampoco los tomes tan a pecho.

En nuestras manos está la capacidad de elegir qué pensar, como interpretar las palabras de los demás, qué sentir, cómo comportarnos, cómo reaccionar, ya sea de una manera que nos perjudique o que nos beneficie.

Al final lo que se nos dice suele ser nada personal. 

Acerca de Honduras Positiva

Honduras Positiva nace con el deseo de ser una opción donde encontrar pensamientos llenos de optimismo y esperanza. No se limita a solo autores hondureños, aunque muchos escritos son míos y como orgulloso catracho los he agregado y decidido compartir. También todas las fotografías que aleatoriamente cambian en la portada son propias, tomadas en mis diferentes viajes por nuestra bella Honduras. Espero lo disfruten. Fernando
Esta entrada fue publicada en Fernando García, Reflexion y etiquetada , , , , . Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario